top of page

Historia del pijama y curiosidades sobre la ropa de dormir.



¿Te has preguntando alguna vez cuál es la historia del pijama? ¿Cómo hemos llegado a preferir el pijama para dormir? No te pierdas el siguiente post porque seguro que va a despertar tu curiosidad.


Llegas a casa después de un día duro de trabajo. Ya en el trayecto estás pensando que te vas a enfundar en tu cómodo pijama, lanzarte en el sofá y leer o ver la televisión.


Piensa en el sofá como una de las prendas más cómodas que tienes en casa. No sólo para dormir, que también claro.


Pero no siempre ha sido así. En la historia del pijama esta prenda ha pasado por muchas “vicisitudes”.


Si retrocedemos en el tiempo nos damos cuenta que el hombre y la mujer han dormido desnudos durante buena parte de la historia de la humanidad y sólo se resguardaban del frio con la pieles de los animales que cazaban. Y esto ha sido así al menos hasta el siglo XV.


Historia del pijama a partir del siglo XV


A partir de este siglo, ya en la Edad Media, se popularizaron los Camisones como los conocemos ahora, evidentemente, no eran.


Estamos hablando de batas largas, con manga larga y puños cerrados. En realidad este tipo de batas servían tanto para dormir como para estar por casa.

Los tejidos eran muy bastos pero aún así sólo estaban al alcance de los más pudientes. De las clases altas y la nobleza.


No se tenía un concepto de “ropa para dormir”. Era más bien una prenda para tapar la desnudez.


Historia del pijama a partir del siglo XVIII


Desde luego que los avances para la comodidad de las personas no avanzaban en la Edad Media como lo hacen hoy en día. Y esas batas largas y más bien feas estuvieron con nosotros otros tres siglos.


Nos tenemos que remontar al siglo XVIII para empezar a ver algo parecido a nuestros actuales pijamas. Y nos tenemos que esperar a las ansias conquistadoras del Imperio Británico.


Nos explicamos.


Fueron los británicos quienes descubrieron el pijama ya como lo conocemos ahora. Sería mejor decir que fueron los que lo introdujeron en Occidente.


En lo que fueron sus colonias de India, Pakistán, Irán y Bangladesh llevaban muchísimo tiempo utilizando camisas amplias y no menos amplios pantalones para dormir. Lo cierto es que la palabra pijama viene de la lengua persa. Allí lo llaman “pae-jama” o “pai-jama”.


Ahora bien. Todavía tenemos que esperar muchas décadas para que el uso del pijama se popularizara por todas las clases sociales. Primero fue utilizando por las cases nobles y más bien como una prenda exótica y un símbolo de que eran conquistadores.


A finales del siglo XIX el pijama ya estaba completamente extendido por todas las capas sociales. Su uso se popularizó y continúa siendo la principal ropa de dormir la mayoría de las poblaciones.


De hecho, y según un artículo aparecido en el diario La Razón, solo el 8 por ciento de la población todavía prefiere dormir desnuda.

Y en las encuestas el 40 por ciento dice que no dormiría jamás sin un buen pijama. El resto prefiere dormir con pantalones cortos y camisetas de manga corta.


Pero el pijama sigue siendo una prenda que está en todos los hogares españoles en mayor o menor medida.


Diferencias Oriente-Occidente


El pijama en la india no distinguía entre sexos. Lo utilizaban indistintamente hombres y mujeres.


De hecho la traducción de la palabra hindú podría ser algo así como una prenda para mantener las piernas calientes.


En Europa sobre todo el pijama se popularizó única y exclusivamente como prenda masculina dejando a las mujeres todavía el camisón.


Todo esto cambió en la década de los años 20 del pasado siglo cuando diseñadores de la talla de Coco Chanel pusieron de moda el pijama de dos piezas también para las mujeres.


Era una manera de luchar contra los prejuicios que todavía existían y que decían que las mujeres no podían o no debían llevar pantalones.

Hoy en día los pijamas no tan sólo son para ir a la cama, sino para estar cómodamente en casa descansando con la familia.


A todo ello ha ayudado la industria textil que ha sabido crear pijamas cada vez más cómodos. Se utiliza sobre todo el algodón que es sabido que es la fibra natural que mejor cuida de la piel y la más transpirable.

Utilizar el pijama tiene muchas ventajas ya que evita pasar frío durante el invierno o la sudoración excesiva durante el verano.


No dejes de comprar pijamas


No dejes de comprar pijamas. Son muchas las ventajas que tiene dormir con él tal y como te explicábamos en este post. También es cierto que dormir con pijama es una costumbre. Quien se haya acostumbrado a dormir con él jamás lo cambiará.


Con el tiempo, los pijamas continúan siendo la ropa de dormir por excelencia pero también se han convertido en un complemento de moda más. Muchas combinaciones, muchos diseños… Siempre hay un pijama que casa con la personalidad y la manera de ser de quien lo lleva.


Acabamos ya. En este post hemos querido contarte la curiosa historia del pijama. Como has podido leer su origen está en las antiguas colonias británicas que lo empezaron a utilizar mucho antes que los europeos. De hecho la palabra para designarlos también proviene de allí.


¿Eres de los que duerme con pijama o prefieres otra ropa de dormir? Cuéntanos y explícanos tus razones para dormir con pijama o sin él en la sección de comentarios que verás a continuación.


¿Te ha gustado lo que te hemos contado? ¿Te ha parecido curioso? Si tu respuesta es que sí nos encantaría que lo compartieras a través de tus redes sociales. Seguro que tienes un familiar o amigo que le pueda interesar la historia del pijama.


Comments


bottom of page